Unidades de purificación de agua

Las necesidades de agua potable crecen con el aumento de la población mundial. Las actividades humanas también contribuyen a reducir los recursos de agua potable disponible, por causa de la contaminación industrial y de la polución.

Vichem desarrolló un sistema cuya capacidad puede variar entre un módulo compacto móvil, que cabe en un contenedor de 40 pies (12,2 metros), que puede transportarse al lugar donde se produjo la contaminación para producir agua purificada en el sitio, hasta una unidad completa capaz de abastecer una pequeña ciudad con agua potable.

Nuestra unidad se concibe para el tratamiento de agua contaminada. Es capaz de tratar diversas fuentes de agua contaminada, tales como: aguas dulces superficiales, aguas estancadas, aguas residuales, aguas salobres, aguas usadas de procesos industriales, etc. Nuestro proceso se basa en la filtración con membrana combinada con ozonización. El objetivo es eliminar del agua las sustancias contaminantes, microbiológicas, orgánicas e inorgánicas, incluso si están en altas concentraciones, para devolverla sin peligro al ambiente, o para producir agua potable.

La filtración a través de membrana de cerámica es, en principio, un medio muy seguro y sencillo de limpiar aguas contaminadas; de hecho, los poros de la membrana cerámica ofrecen una barrera mecánica que separa de forma selectiva las sustancias contaminantes del agua. En la práctica, sin embargo, esto es más complicado porque las membranas se tupen continuamente debido a una capa de partículas que se depositan sobre su superficie y que obstruye los poros, con lo que se reduce la eficacia de la filtración.

Esto exige procesos complicados para calcular el nivel de presión, la frecuencia de los ciclos de retrolavado químico y el número y tipo de tratamientos previos necesarios para asegurar condiciones de funcionamiento rentables para la unidad de filtración.

La técnica de ozonización consiste en inyectar agua ozonizada en el reactor en el que las membranas están instaladas. El ozono es un oxidante poderoso producido in situ por el paso de moléculas de dioxígeno a través de un arco eléctrico. Combinando la ozonización con la filtración con membrana cerámica, puede eliminarse una gran cantidad de sustancias contaminantes y así reducir la inevitable obstrucción que se produce cuando las membranas cerámicas se usan solas.

Contenedor visto desde fuera

Sistema de purificación de agua instalado en el contenedor

• Sin incrustaciones biológicas en las membranas
• Mayor y más estable flujo permeable
• No es necesario revertir permanentemente el flujo para limpiar las membranas
• Puede alcanzarse una productividad elevada de hasta el 99,9%
• Sólo se producen pequeñas cantidades de concentrados, lo que posibilita la eliminación
• Este proceso multietapas genera una mayor barrera a virus y patogénicos
• Debido a las limitaciones de espacio, pueden proyectarse unidades de tratamiento más compactas
• El sistema completo es de simple control
• No es necesario añadir químicos, sólo oxígeno del aire
• Sin producción de subproductos clorados